Que respetan la voluntad del ser amado que ha perecido, ser donante es la máxima representación del respeto por los deseos del aquel a quien deben decir adiós. Aquel que en pleno uso de sus facultades mentales y lleno de amor por su prójimo, les ha hecho saber que desea regalarle vida a quien verdaderamente lo requiera llegado el momento de su partida.

La donación representa la cúspide de los acontecimientos médicos, la oportunidad de hacer uso de sus habilidades quirúrgicas para engendrar vida nueva a sus pacientes, sabiendo que tan solo son instrumentos de la voluntad de amor de otro ser humano semejante a sí mismos. Artífices simples de la expresión máxima de una especie que día a día lucha por una supervivencia de máxima calidad en un mundo de hostilidad creciente.

El donante significa la gratificación absoluta por la vida, la adrenalina de coordinar a un variopinto grupo de especialistas de cuya precisión depende se logre mantener la voluntad de amor más sublime que podemos expresar como seres humanos; regalar vida diciendo sí a la donación de órganos y tejidos.