La detección a tiempo salva vidas
El cáncer de mama es una enfermedad que afecta a mujeres de todas las edades en México y en todo el mundo.
En nuestro país, se ha convertido en un problema de salud pública de gran relevancia, sin embargo; la buena noticia es que el cáncer de mama es altamente prevenible y tratable cuando se detecta en etapas tempranas.
El cáncer de mama se caracteriza porque las células en el tejido mamario se multiplican sin control. A medida que estas células anormales se acumulan, forman un tumor que puede ser benigno (no canceroso) o maligno (canceroso). Los tumores malignos tienen el potencial de invadir tejidos circundantes y diseminarse a otras partes del cuerpo a través del torrente sanguíneo y el sistema linfático, lo que se conoce como metástasis.
Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) y la Secretaría de Salud, el cáncer de mama es una de las principales causas de muerte entre las mujeres mexicanas. En 2021, se estimó que se diagnosticaron alrededor de 27,000 nuevos casos de cáncer de mama en el país, convirtiéndose en una de las principales causas de morbilidad en mujeres mayores de 25 años, siendo la detección temprana fundamental para un pronóstico favorable.
El riesgo de cáncer de mama aumenta con la edad y más si se cuenta con antecedentes familiares de cáncer de mama. Las mutaciones en los genes BRCA1 y BRCA2 de igual forma incrementan significativamente el riesgo del desarrollo de este cáncer. El uso de anticonceptivos hormonales puede influir en el riesgo al igual que el sobrepeso y la obesidad.
La mamografía es una herramienta fundamental en la detección temprana del cáncer de mama, ya que puede detectar tumores antes de que sean palpables, lo que aumenta significativamente las posibilidades de un tratamiento exitoso. Todas las mujeres deben considerar realizarse una mamografía de detección a partir de los 40 años.
El autoexamen de mama es una técnica sencilla que las mujeres pueden realizar por sí mismas. Aunque no reemplaza la mamografía ni la evaluación clínica, puede ayudar a las mujeres a estar atentas a los cambios en sus senos y hoy 19 de octubre, día internacional de la lucha contra el cáncer de mama me gustaría proveer a las mujeres lectoras de las herramientas básicas para realizar esta autoexploración.
Inspección visual: De pie frente a un espejo, observe sus senos en busca de cambios en la forma, el tamaño, la textura o la piel.
Palpación de pie: Mientras está de pie, levante el brazo izquierdo y use la mano derecha para palpar su mama izquierda. Haga lo mismo con el otro lado. Recorra todo el seno bien siguiendo el curso de las manecillas del reloj o bienes formar de espiral, mi recomendación es usar ambas. No olvides revisar la axila, es parte de la glándula mamaria.
Palpación acostada: Acuéstese boca arriba y utilice las yemas de los dedos para examinar sus senos en círculos concéntricos, desde la parte exterior hacia el pezón.
Si nota cambios en sus senos, como bultos, hinchazón, dolor, cambios en la textura de la piel o secreción inusual del pezón, es importante que consulte a un médico de inmediato. El autoexamen de mama puede ayudar a detectar cambios tempranos que requieren evaluación médica.
La prevención del cáncer de mama es un desafío importante en México, es un compromiso de salud que todos debemos asumir. La educación, la concienciación, la detección temprana y la adopción de un estilo de vida saludable son fundamentales para reducir el riesgo de cáncer de mama. Cada mujer debe tomar la responsabilidad de su propia salud y buscar la asesoría de un profesional de la salud para evaluar su riesgo individual y tomar medidas preventivas.